27 marzo 2007

El guardian entre el centeno

Otra de las cosas que tenía pendiente para el pasado fin de semana era terminar este libro. Es una historia narrada en primera persona por el protagonista, Holden Caulfield. Un adolescente que decide vagar unos días por Nueva York tras ser expulsado de la escuela preuniversitaria donde estudia, (en realidad ha sido expulsado de todas a las que ha ido) para no volver a casa y que sus padres no se enteren de lo sucedido antes de tiempo. Caulfield es un tipo al que casi nada le gusta, y casi todo le deprime, sobre todo porque ve hipocresía por todas partes y es algo que no aguanta. Además le gusta mentir bastante. Aunque en el fondo es sólo un adolescente con sus propios problemas.

Aunque podría hablar de muchas cosas referentes al libro, recalcaré únicamente lo que me parece más relevante. Lo primero que me ha llamado la atención del libro es que la personalidad del protagonista lo envuelve todo. La narración en primera persona cumple perfectamente con su propósito, y en vez de leer una novela de Salinger parece que esté leyendo la historia real del propio Holden.
Es una persona muy crítica con la gente en general. Sólo tiene buenas palabras para su hermana menor, Phoebe. Aunque es adolescente, puede que sea bastante inmaduro, y creo que en el fondo lo es aposta porque no le gusta el mundo adulto en el que vive, donde, como he dicho antes, sólo ve hipocresía. Phoebe representa pues la inocencia, la sinceridad y la pureza que no encuentra en ningún otro lugar, y por eso le agasaja continuamente y se comporta con ella como un protector. Ella aún no esta corrompida por la sociedad. Puede que esté equivocado, pero cuando habla de su trabajo ideal, creo que es eso lo que da a entender.
Y la última cosa que me parece relevante es que da la impresión que Salinger se cansó de repente de escribir la novela y la terminó atropelladamente. Es un libro corto y hay gente que pueda pensar eso. Pero como digo, solo da la impresión. No es Salinger el que se cansa de escribir, sino Caulfield de narrar. Podría habernos contado, como bien dice, lo que pasó después del día del tiovivo, pero simplemente no le apetece. Es su personalidad. Lo que vuelve a dejar patente la no intromisión del autor en la novela. Exquisito.


Es un libro altamente recomendado. Aunque no me he sentido en ningún momento identificado con el protagonista, si le he entendido a la perfección. Gente, sobre todo adolescentes, que crean estar en un pozo oscuro sin salida, pueden encontrar en esta novela una referencia y un punto de apoyo estupendo. Al menos puede quitar la sensación de soledad, de pensar que eres la única persona así en el mundo. Y si no eres de esa clase de personas, puede ayudarte a entenderlas.

A pesar de ser un libro escrito en los años cuarenta, es interesante como la mayoría de los problemas, inquietudes, miedos, etc, en los adolescentes siguen siendo los mismos. Eso es todo, probablemente haya aburrido ya bastante, y ya me he extendido demasiado para ser una entrada de blog.

1 comentario:

kaO¡ dijo...

Me alegro de que te haya gustado, no sé si mucho pero sí al menos lo suficiente como para terminarlo -aunque sólo sea por mi insistencia para que lo leyeras.
en fin, a mí me encanta, i no sé si porque me identifico con mi adorado Cauldfield o porque me ayuda a entender a personas como él. Es un tipo mui singular, me gusta su filosofía de hacer las cosas solamente porque están en vena, me gusta su opinión de la sociedad, me gusta su extremismo...bueno, vale, quizás sí me identifico un poco, no sé. : )

lo dicHo, un libro como pocos.

'odio el cine con verdadera pasiÓn, pero me encanta imitar a los artistas.'

kaO¡